La principal amenaza para los jaguares es su cacería directa en represalia por depredar ganado doméstico. Una de las principales actividades económicas en la región es la ganadería y uno de nuestros grandes retos es asegurar la buena convivencia entre los productores locales de ganado y los jaguares, evitando la depredación por parte de los jaguares y promoviendo una ganadería más productiva y sustentable.
La deforestación en consecuencia del cambio de uso de suelo para el desarrollo de actividades productivas como la ganadería han ocasionado que se pierdan grandes extensiones del hábitat del jaguar en la región. Dado que la ganadería es la principal causa de deforestación en la Selva Maya, buscamos trabajar con los productores locales implementando alternativas de manejo que promuevan una ganadería más rentable y que a su vez evite una mayor deforestación.
La cacería de subsistencia y la cacería comercial es una práctica aún persistente en el sur de la Selva Maya. Este problema además de afectar a las poblaciones de fauna silvestre que habitan en la región, afecta a sus depredadores naturales como los jaguares que al no encontrar a sus presas naturales depredan el ganado doméstico. Para resolver esto trabajamos con grupos de vigilantes comunitarios fortaleciendo sus capacidades y buscamos promover acuerdos internos en las comunidades locales para que regulen la cacería. Además, proporcionamos ayuda técnica a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas con la finalidad de fortalecer la vigilancia en las Áreas Naturales Protegidas de la región.
